Existe una duda muy común en las finanzas: ¿Se puede invertir sin riesgo? La respuesta corta es no; sin embargo, existen instrumentos de bajo riesgo que son una excelente opción para principiantes o perfiles conservadores. Adicionalmente, para entender más sobre este tema, hay varios aspectos que debes conocer.
Es por eso que en este artículo te traemos cuatro instrumentos que puedes considerar. Además, sigue leyendo para descubrir desde qué es el riesgo y por qué no es posible invertir sin estar expuestos.
¿Qué es el riesgo en las inversiones?
El riesgo en las inversiones se refiere a la posibilidad de que los resultados de una inversión difieran de la expectativa y la estrategia establecida. Este surge debido a la incertidumbre y la volatilidad en los mercados financieros. En otras palabras, implica la posibilidad de que ocurra un escenario inesperado o que los precios de los activos experimenten una gran variación.
Cada inversionista tiene un perfil de riesgo único, que depende de su disposición, habilidad y capacidad para tolerarlo. Aunque toda inversión conlleva un riesgo de pérdida y disminución del capital, es importante controlarlo de manera adecuada para evitar que afecte significativamente el rendimiento de las inversiones.
En general, los inversionistas esperan que los rendimientos obtenidos superen los riesgos asumidos en sus operaciones.
¿Es posible invertir sin riesgo?
Técnicamente no, no es posible invertir sin riesgo. Esto, debido a que todas las inversiones tienen una probabilidad de que no salgan como lo esperado, por mínima que sea.
Ahora bien, hay unas inversiones que tienen más riesgo que otras, las podemos dividir entre las de renta variable y renta fija. Las de renta fija, suelen tener menor probabilidad de riesgo; sin embargo, así sea 1 %, es una exposición que siempre se debe tener contemplada.
No obstante, más allá de que hay inversiones con muy baja probabilidad de impago, hay un riesgo que estará sí o sí en toda inversión: la inflación, un riesgo inherente que siempre se debe tener contemplado en nuestro día a día, más allá del mundo de las inversiones.
Instrumentos de bajo riesgo para empezar a invertir
En nuestra sección exploraremos diversas opciones seguras y accesibles para principiantes y perfiles de bajo riesgo. Cubriremos desde certificados de depósito hasta papeles comerciales, brindando una guía confiable para tu primer paso en el crecimiento financiero.
Certificados de Depósito a Término (CDT)
Un CDT es un instrumento financiero ofrecido por entidades bancarias que le permite a las personas depositar una cantidad específica de dinero durante un plazo determinado, a cambio de recibir intereses. Una de las principales razones por las que los CDT son considerados una opción atractiva es su bajo riesgo. Al tratarse de una inversión respaldada por una institución financiera sólida, los CDT ofrecen una garantía de capital y un rendimiento preestablecido. Te explicaré su funcionamiento con el siguiente ejemplo:
Imaginemos que una persona decide invertir $10,000 en un CDT con una tasa de interés anual del 4 % y un plazo de 1 año. Al abrir el CDT, la institución financiera emitirá un certificado que establece los términos de la inversión. En este caso, al final del año, el inversionista recibiría su inversión inicial de $10,000 más los intereses generados.
Los intereses se calculan multiplicando la inversión inicial por la tasa de interés acordada y el período de tiempo. En este ejemplo, los intereses serían de $400 ($10,000 x 0.04). Al finalizar el plazo de 1 año, el inversionista recibiría un total de $10,400 ($10,000 + $400) como resultado de su inversión en el CDT.
Papeles comerciales
Este es un instrumento de deuda a corto plazo emitido por empresas solventes y de reconocida reputación. Lo utilizan para obtener financiamiento para sus operaciones comerciales. Al ser emitido por empresas sólidas, ofrecen una alta seguridad para los inversionistas. Además, el plazo de vencimiento suele ser relativamente corto, generalmente entre 1 y 270 días, lo que permite tener liquidez. Asimismo, muchos papeles comerciales cuentan con calificaciones de riesgo otorgadas por agencias especializadas, lo que proporciona una guía adicional sobre la calidad crediticia del emisor. Este es el funcionamiento de un papel comercial:
Imagina que Apple necesita financiamiento a corto plazo para cubrir sus necesidades operativas. La empresa decide emitir un papel comercial con un valor nominal de $100,000 y un plazo de vencimiento de 90 días. La tasa de interés acordada para este papel comercial es del 3 % anual.
Pasado el plazo de vencimiento de 90 días, la empresa devuelve al inversionista el capital prestado de $100,000 más los intereses generados. En este caso, serían de $750 ($100,000 x 0.03 x (90/360)). El inversionista recibiría un total de $100,750 como resultado de su inversión en el papel comercial de Apple.
Bonos Corporativos
Un bono corporativo también es un instrumento de deuda emitido por empresas con el objetivo de obtener financiamiento. Estos son préstamos que los inversionistas realizan a la empresa emisora. Al emitir estos bonos, las empresas se comprometen a pagar intereses periódicos y devolver el capital prestado en la fecha de vencimiento. Esto otorga una mayor seguridad a los inversionistas, ya que se respaldan en la solidez financiera de la empresa emisora. Además, si bien hay empresas con mejor calificación de riesgo, suelen tener una muy baja probabilidad de impago.
A diferencia de un papel comercial, los bonos corporativos suelen tener plazos más largos y se utilizan para financiar proyectos a mediano o largo plazo. Además, ofrecen la posibilidad de obtener rendimientos atractivos y predecibles, ya que los pagos de intereses y el reembolso del capital se establecen de manera fija desde el inicio. Básicamente, su funcionamiento es el mismo al de un papel comercial.
Bonos de gobierno
Conocidos como TES en Colombia, o CETES en México, los bonos de gobierno también son instrumentos de deuda, esta vez, emitidos por un país para financiar sus operaciones y proyectos. Estos bonos son considerados una opción altamente segura debido a la solidez crediticia de los gobiernos y su capacidad para recaudar ingresos fiscales.
Un ejemplo de funcionamiento de un bono de gobierno sería el siguiente: supongamos que el gobierno de un país emite un bono con un valor de $10,000, en un plazo de vencimiento de 10 años y una tasa de interés anual del 3 %. Un inversionista adquiere este bono por su bajo riesgo y la confianza en la capacidad del gobierno para cumplir con sus compromisos financieros. A lo largo de los 10 años, el inversionista recibiría pagos periódicos de intereses, generalmente de forma semestral o anual, y al final del plazo de vencimiento, recibirá el reembolso del valor nominal del bono.
Generalmente, la probabilidad de impago en bonos de gobierno es considerada muy baja. Los gobiernos tienen diversas fuentes de ingresos, como impuestos, tasas y otros recursos, lo que les brinda una base sólida para cumplir con sus obligaciones de deuda; sin embargo, es importante que tengas en cuenta que, existen factores macroeconómicos y políticos que podrían afectar la capacidad de un gobierno para cumplir con sus pagos, por lo que siempre es recomendable evaluar la situación económica y fiscal del país emisor antes de invertir en bonos de gobierno.
Recuerda: no existe la forma ni el instrumento para invertir sin riesgo. En toda inversión hay que tener contemplado los factores que pueden exponer el activo financiero de tu preferencia. No obstante, hay títulos de renta fija con muy poca probabilidad de impago, y con muy buenos rendimientos para tu dinero.
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