Comprar tu primera acción es más sencillo de lo que crees, pues gracias a los avances tecnológicos ahora es un proceso muy rápido que puedes hacer con una computadora desde cualquier lugar.
No obstante, para iniciar en el mundo de las inversiones deberás aprender ciertos conceptos, tener objetivos claros y conocer lo más esencial al momento de elegir la mejor empresa para invertir. Por esto, preparamos esta breve guía que te conducirá a través de cada uno de los pasos necesarios.
Sigue leyendo para conocer los cinco pasos que debes seguir para hacer tu primera compra de acciones y comenzar tu camino como inversionista.
Guía para comprar tu primera acción
Comprar una acción es más fácil de lo que piensas; sin embargo, lo más importante para que tu proceso sea exitoso considerar ciertos aspectos fundamentales para hacerlo de manera exitosa.
A continuación, te comparto nuestra breve guía para comprar tu primera acción:
1. Conoce los objetivos de tu inversión
Antes de invertir en cualquier tipo de activo financiero, es fundamental tener una comprensión clara de qué esperas lograr con tu dinero y cómo las acciones pueden ayudarte a alcanzar esas metas. Este paso es crucial porque tus objetivos determinarán aspectos clave de tu estrategia de inversión, como el tipo de activos que elegirás, el horizonte temporal en el que esperas obtener rendimientos, la cantidad de capital que estás dispuesto a invertir y el nivel de riesgo que puedes asumir sin comprometer tu estabilidad financiera.
Define tus metas financieras
Lo primero que debes preguntarte es: ¿por qué quiero invertir en acciones? Existen distintos tipos de objetivos financieros que pueden guiar tu estrategia de inversión:
- Generación de ingresos pasivos: Si deseas obtener ingresos constantes, podrías enfocarte en acciones de empresas que pagan dividendos periódicos. Este enfoque es popular entre inversionistas que buscan estabilidad y rentabilidad sin necesidad de vender sus acciones.
- Crecimiento de capital a largo plazo: Si tu objetivo es incrementar significativamente el valor de tu inversión en un horizonte de varios años, puedes optar por acciones de empresas emergentes con alto potencial de crecimiento. Sin embargo, este tipo de inversión suele implicar más volatilidad.
- Ahorro para un objetivo específico: Algunas personas invierten con una meta clara en mente, como comprar una casa, pagar la educación universitaria de sus hijos o preparar su jubilación. En estos casos, la selección de acciones debe alinearse con el plazo de la meta y el nivel de seguridad que se desea.
Evalúa tu tolerancia al riesgo
El riesgo es una parte inherente de cualquier inversión, pero la cantidad de riesgo que puedes asumir depende de tu perfil financiero y tu disposición emocional para enfrentar fluctuaciones en el mercado. Reflexiona sobre preguntas como:
- ¿Cómo reaccionarías si el valor de tu inversión cayera un 20% en pocos meses?
- ¿Tienes otras fuentes de ingresos que te permitan soportar posibles pérdidas?
- ¿Cuánto tiempo estás dispuesto a esperar antes de obtener rendimientos?
Si tienes una baja tolerancia al riesgo, es posible que prefieras invertir en empresas grandes y consolidadas, que suelen tener menos volatilidad. Por el contrario, si tienes una alta tolerancia al riesgo y un horizonte de inversión más largo, podrías considerar acciones de empresas tecnológicas o en sectores innovadores, donde el crecimiento puede ser alto, pero también lo es la posibilidad de pérdidas.
Define tu horizonte de inversión y liquidez
Otro factor clave es el periodo de tiempo durante el cual puedes permitirte mantener tu dinero invertido sin necesidad de retirarlo. Si estás invirtiendo con un horizonte de corto plazo (menos de un año), es preferible optar por acciones menos volátiles o incluso considerar alternativas más seguras, como bonos o fondos de inversión diversificados. En cambio, si tu horizonte es de cinco, diez o más años, puedes asumir un poco más de riesgo con la expectativa de obtener mayores rendimientos a largo plazo.
Además, evalúa cuánta liquidez necesitas en tu portafolio. Si en cualquier momento puedes requerir tu dinero, debes asegurarte de que al menos una parte de tus inversiones sea fácilmente liquidable sin grandes pérdidas.
2. Investigación a la empresa
Antes de invertir en una acción, es fundamental realizar una investigación profunda sobre la empresa. Este análisis determinará en gran medida los rendimientos futuros de tu inversión y, por ende, las ganancias que podrías obtener. No basta con mirar solo los datos financieros, sino que es necesario tener una visión holística, considerando factores como el sector en el que opera la empresa, su modelo de negocio, su posición competitiva y su estrategia a largo plazo.
Entender la industria y el sector
El primer paso en la investigación de una empresa es conocer en qué industria y sector se desenvuelve. Algunas preguntas clave que debes hacerte incluyen:
- ¿Se trata de una industria en crecimiento o en declive?
- ¿Qué factores están impulsando o limitando el crecimiento del sector?
- ¿Cuáles son los principales competidores de la empresa y cómo se compara con ellos?
Por ejemplo, las empresas tecnológicas suelen tener un alto potencial de crecimiento, pero también enfrentan una competencia feroz y cambios constantes en la industria. En contraste, empresas en sectores más tradicionales, como el consumo masivo o los servicios públicos, tienden a ser más estables, pero con menores márgenes de crecimiento.
Evaluación del modelo de negocio
El modelo de negocio de una empresa describe cómo genera ingresos y cómo planea mantener su rentabilidad en el tiempo. Es clave entender:
- ¿Cuál es su propuesta de valor? Es decir, qué la hace única y por qué los clientes eligen sus productos o servicios.
- ¿Cómo obtiene ingresos? ¿Depende de una sola fuente de ingresos o tiene un modelo diversificado?
- ¿Qué tan sostenible es? ¿Puede resistir cambios en la economía o enfrenta riesgos estructurales?
Una empresa con un modelo de negocio sólido y adaptable a los cambios del mercado tendrá mayores probabilidades de éxito a largo plazo. Por ejemplo, Amazon ha diversificado sus ingresos a través de comercio electrónico, servicios en la nube (AWS) y publicidad digital, lo que la hace menos dependiente de un solo segmento.
Ventajas competitivas y barreras de entrada
Una empresa que posee ventajas competitivas sostenibles tiene una mayor probabilidad de mantener su liderazgo en el mercado. Algunas de estas ventajas incluyen:
- Marca fuerte: Empresas como Apple o Coca-Cola tienen marcas reconocidas globalmente, lo que les da una base de clientes leales.
- Tecnología patentada: Empresas como Tesla o NVIDIA poseen tecnologías propias que les brindan una ventaja sobre la competencia.
- Efecto red: Plataformas como Facebook o Google se benefician de tener una gran base de usuarios que atrae aún más usuarios.
- Economías de escala: Empresas como Walmart pueden ofrecer precios más bajos gracias a su gran volumen de operaciones.
Además, es importante analizar las barreras de entrada en la industria. Si cualquier nueva empresa puede ingresar fácilmente al mercado y competir, la ventaja de la compañía en la que estás invirtiendo podría ser frágil.
Calidad del equipo de liderazgo
El equipo directivo es un factor crítico en el éxito de una empresa. Un liderazgo sólido y visionario puede marcar la diferencia entre una empresa que prospera y una que se estanca. Algunos aspectos a considerar incluyen:
- Experiencia y trayectoria del CEO y los ejecutivos clave. ¿Han gestionado con éxito otras empresas en el pasado?
- Estrategia de crecimiento y visión a largo plazo. ¿Tienen un plan claro y bien estructurado?
- Gestión de crisis. ¿Cómo han manejado problemas anteriores, como crisis económicas o problemas regulatorios?
Por ejemplo, bajo el liderazgo de Tim Cook, Apple ha seguido creciendo e innovando después de la era de Steve Jobs. En cambio, empresas con liderazgos cuestionables pueden experimentar problemas internos que afecten su desempeño.
Análisis financiero detallado
Si bien comprender el modelo de negocio y la industria es clave, los datos financieros ofrecen una visión clara de la salud económica de una empresa. Algunas métricas esenciales a evaluar incluyen:
- Ingresos y crecimiento de ventas. ¿Los ingresos están aumentando de manera constante?
- Beneficio neto y margen de rentabilidad. ¿La empresa es realmente rentable o está perdiendo dinero?
- Deuda y apalancamiento financiero. ¿Tiene niveles de deuda manejables o está sobreendeudada?
- Flujo de caja. ¿La empresa genera suficiente efectivo para operar sin problemas?
Es importante revisar estos datos trimestralmente y compararlos con los de empresas similares en la industria para tener una mejor perspectiva.
Factores externos que pueden afectar a la empresa
Finalmente, considera los factores externos que pueden influir en la empresa y en la industria en general, tales como:
- Regulaciones gubernamentales: Cambios en la legislación pueden impactar la operación de una empresa (por ejemplo, nuevas normativas ambientales o fiscales).
- Innovaciones tecnológicas: Empresas que no innovan pueden quedar rezagadas frente a la competencia.
- Condiciones macroeconómicas: Factores como la inflación, tasas de interés y ciclos económicos pueden afectar la rentabilidad.
Un ejemplo de esto es la industria de los vehículos eléctricos, donde las regulaciones medioambientales y los avances en baterías pueden determinar qué empresas prosperarán y cuáles quedarán atrás.
Además, no te olvides de leer todas las noticias de su sector, algunos de estos medios pueden ser de ayuda para ti.
3. Realiza una valoración de la acción que te interesa
La valoración de una acción es un paso fundamental antes de decidir comprarla, ya que te permitirá determinar si está sobrevalorada, infravalorada o si tiene un precio justo en relación con su desempeño financiero y sus perspectivas futuras. Esta valoración no es solo una cuestión de números, sino que también refleja la percepción que el mercado y los inversionistas tienen sobre la empresa.
Existen diversas métricas y métodos para valorar una acción, pero en esta ocasión nos enfocaremos en tres indicadores clave: el ratio P/E (Price to Earnings), el ratio P/S (Price to Sales) y el modelo de descuento de flujo de caja (DCF).
1. Ratio Price to Earnings (P/E) – Relación Precio-Beneficio
El P/E ratio es uno de los indicadores más utilizados para evaluar el precio de una acción en relación con sus beneficios. Se calcula con la siguiente fórmula:
Un P/E alto puede significar que el mercado tiene grandes expectativas de crecimiento sobre la empresa, lo que puede hacer que su precio sea más elevado en comparación con sus beneficios actuales. Sin embargo, también podría indicar que la acción está sobrevalorada.
Por otro lado, un P/E bajo sugiere que la empresa podría estar infravalorada o que el mercado tiene dudas sobre su crecimiento futuro.
Cómo interpretar el P/E según el tipo de empresa:
- Empresas de crecimiento suelen tener un P/E alto, ya que los inversionistas esperan que aumenten significativamente sus ganancias en el futuro.
- Empresas de valor suelen tener un P/E bajo porque ya son compañías establecidas con menor potencial de crecimiento, pero con ingresos y beneficios estables.
- Empresas que pagan dividendos tienden a tener P/E moderados, ya que reinvierten menos dinero en expansión y destinan más a los accionistas.
Ejemplo práctico:
Si una acción tiene un precio de $100 y su beneficio por acción (EPS) es de $5, entonces su P/E ratio sería:
Esto significa que los inversionistas están dispuestos a pagar $20 por cada dólar de ganancia de la empresa.
2. Ratio Price to Sales (P/S) – Relación Precio-Ventas
El P/S ratio compara el precio de la acción con los ingresos generados por la empresa. Se calcula con la siguiente fórmula:
Este ratio es útil porque mide cuánto están dispuestos a pagar los inversionistas por cada dólar de ventas que genera la empresa.
- Un P/S alto indica que la empresa está cotizando a un precio elevado en comparación con sus ingresos, lo que podría sugerir una sobrevaloración.
- Un P/S bajo puede ser una señal de subvaloración y podría representar una oportunidad de inversión si la empresa tiene buenas perspectivas de crecimiento.
Ejemplo práctico:
Si una empresa tiene ventas de $50 millones y su capitalización bursátil es de $200 millones, el P/S ratio sería:
Esto significa que los inversionistas están valorando la empresa en 4 veces sus ingresos anuales.
Importancia del P/S según el sector:
- En sectores con altos márgenes de ganancia (como tecnología o software), el P/S suele ser más alto.
- En sectores con márgenes bajos (como retail o manufactura), el P/S suele ser más bajo.
4. Selecciona una plataforma de inversión
Una vez que hayas investigado la empresa y evaluado la valoración de la acción, es el momento de buscar una plataforma de inversión que se adapte a tus necesidades. Hay muchas opciones disponibles en el mercado, desde brókers tradicionales, hasta aplicaciones móviles que permiten invertir desde cualquier lugar.
Es importante elegir una plataforma que sea segura, confiable, y con reputación. Asegúrate de investigar las comisiones y tarifas asociadas con la plataforma. Pero, será determinante que el bróker tenga los activos que deseas comercializar, así como las herramientas para tu operación, por ejemplo, podrías evaluar que tenga la opción de comprar acciones fraccionadas, ADR, que se pueda operar en pre y post mercado, pero, estas condiciones deben evaluarse de acuerdo a tus objetivos.
Una vez que hayas seleccionado una plataforma, es el momento de abrir una cuenta de inversión y comenzar a comprar tus primeras acciones. Asegúrate de seguir las pautas de investigación y evaluación que has aprendido en los pasos anteriores para tomar decisiones de inversión acertadas.
5. Compra tu primera acción
Una vez que hayas investigado la empresa, evaluado la valoración de la acción, y seleccionado una plataforma de inversión, estás listo para comprar tu primera acción. Antes de realizar la compra, es importante asegurarse de tener fondos suficientes en tu cuenta de depósito, y de verificar que estás comprando la acción y la cantidad correcta.
Cuando estés listo para comprar, asegúrate de ingresar el símbolo de la acción correcta. La plataforma de inversión debe indicar el precio actual de la acción y el costo total de la transacción, incluyendo comisiones y tarifas asociadas. Si todo parece correcto, haz clic en el botón de compra y confirma la transacción.
Sé precavido con este paso, una vez compras las acciones, no habrá vuelta atrás, a menos que el bróker tenga una opción de reembolso. Pero, los brokers son muy sencillos hoy en día, con solo seleccionar la acción y la cantidad a comprar, basta con solo dar un clic para finalizar la transacción.
¿Qué debes tener en cuenta al hacer tu primera compra de acciones?
Después de haber comprado la acción, y de haber establecido tus objetivos, en los que debe estar incluido un periodo de tiempo esperado, no te olvides de monitorearla. No tiene que ser todos los días, pero sí debes hacerlo para retroalimentar, analizar y en algunos casos, vender. Sé paciente, no tomes decisiones apresuradas, recuerda que las acciones son un activo de inversión a largo plazo.
Además, debes estar pendiente en situaciones de volatilidad, como por ejemplo, coyunturas macroeconómicas, políticas o tendencias.
Si todavía tienes algunas dudas sobre cómo funciona el mercado de acciones, no te preocupes, te invito a unirte al curso gratuito que tenemos en The Investor U en el que te explicaremos los conceptos básicos para iniciar en el mundo de las inversiones.
El mundo ha cambiado, los mercados también lo hicieron. Invertir en acciones es más fácil de lo que piensas. Solo necesitas definir tus objetivos financieros, tener la educación necesaria para tomar buenas decisiones, ejecutarlas y todos los beneficios de una acción llegarán con el tiempo. Y estamos seguros de que esta guía, te será de gran ayuda.